Y pasó todo

fotografía: Victor González

Nos levantamos bien temprano para desayunar en el Hotel Catedral y la mañana ya amanecía lluviosa, conforme fue avanzando la mañana la lluvía persistía pero teníamos fe de que en algún momento cambiaría, y así fue. A las 11:15 salíamos por la puerta principal de la Casa de Hermandad y nos dirigíamos a realizar nuestro recorrido.
La Caravana fue amenizada por cánticos navideños, los populares villancicos y alguna que otra pandereta, nos sorprendió la cantidad de gente que nos recibió para darnos alimentos, ropa, juguetes.
Lo principal fue la ilusión que le pusimos a este novedoso acto y que cumplimos el objetivo: recaudar alimentos y ropa para los más necesitados.
Tras la caravana, una representación del grupo joven se desplazó hasta el comedor social de la milalgrosa para dejar los alimentos, y estuvieron muy agradecidos, y pudimos constatar de que verdaderamente están necesitados, porque cada vez son más las personas que se acercan día a día a pedir un plato de comida.
Agradecer a todo el vecindario que bajó y nos hizo su aportación y en especial a las monjas de las puras que fueron generosísimas con nosotros, también la Asociación de Lupus colaboraron y mucho con nosotros, varios miembros de la asociación se acercaron hasta la Casa de Hermandad, con Pepa, su presidenta a la cabeza.
También agradecer al Grupo Joven de la Hermandad del Silencio que se acercó hasta la casa de hermandad para realizar su particular aportación y nos acompañaron durante un tramo del recorrido.
Nuestra próxima cita sera en la Función de San Juan Evangelista, el próximo lunes día 27 de Diciembre, tras ello como nos han sobrado bebidas, cada uno llevará una tapilla para poder degustarlo tras la celebración de la Santa Misa.